El MVP de febrero Ersan Ilyasova



EL TURCO ESTÁ VIVIENDO SUS MEJORES SEMANAS DESDE QUE LLEGÓ A LA NBA

'MVP de la Jornada' para Ersan Ilyasova, el enigmático 'Quinto Clash' con pasado culé


Febrero fue una gran mes para Ersan Ilyasova (seis dobles dobles, un palmeo para dar la victoria a los suyos; hazañas tales o lograr un 29-25), y marzo va por el mismo camino por el ex del Barcelona tras ser nombrado MVP de la Jornada NBA del 11 de marzo tras sumar 31 puntos y 12 rebotes en la victoria de sus Bucks contra Toronto.
Hace unos cuantos años, allá por 2007, Ilyasova fue apodado en la blogosfera como El Quinto Clash. Su corte de pelo y su actitud guitarrera sobre la cancha bautizaban a un alero talentoso que nos conquistaba con su juego total.
Los inicios de la carrera de Ersan Ilyasova, sin embargo, vienen marcados por una polémica que nunca terminó de quedar aclarada. Mientras que unos decían que en realidad se trataba del uzbeko Arsan Ilyasov nacido en 1984, otros defendían que no, que era turco y nacido en 1987. En categorías inferiores, Ersan dominó de manera apabullante, lo que parecía reforzar la primera teoría.
Pero esos misterios sin esclarecer ahora no llevan a ninguna parte. El caso es que Ilyasova está cuajando una notable temporada en la NBA, y da igual que este curso cumpla 25 ó 28 años. Lo que importa es que los Bucks tienen en él a un alero alto capaz de ofrecer un rendimiento cada vez más sólido en la mejor liga del mundo (esta temporada está promediando 12,4 puntos y 8.9 rebotes).
Con sus 2.08 y 106 kilos, Ersan puede jugar con total comodidad de tres y de cuatro. Tiene los brazos largos, es un buen saltador, corre muy bien la cancha, posee ese instinto innato para el rebote y tiene una notable lateralidad en sus movimientos. Además, técnicamente es un jugador de clase y con muy buena mano para el lanzamiento lejano.
En sus cuatro años en la NBA sus promedios son de 9 puntos y 5,7 rebotes, pero siempre ha dado la sensación de poder aportar más, por físico y por calidad. Ahora, los Bucks tienen sobre la mesa una difícil papeleta, la de su renovación. Este año, el alero cobra 2.541.000 dólares y termina contrato, por lo que será un agente libre cotizado. A nadie le importará ya si tiene delante a Ersan Ilyasova o a Arsen Ilyasov. Lo importante serán sus solos de guitarra. Y Ersan tendrá ante sí un dilema muy de los Clash: Should I Stay or Should I Go.

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